Tras la muerte de nueve personas por consumir el llamado 'cococho' en el sector de El Boliche, en el centro de Barranquilla, las alarmas sobre el consumo de licor adulterado se han encendido nuevamente en la ciudad.

Para entender la gravedad de esta intoxicación, la médica toxicóloga Senith Beleño Rodríguez, coordinadora del servicio de toxicología de la Clínica Reina Catalina y docente de la Universidad Simón Bolívar, explicó cómo actúa este veneno en el cuerpo humano.

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La doctora Beleño detalló que la sustancia letal no es otra que el metanol, conocido popularmente como "alcohol malo". A diferencia del etanol (el alcohol presente en cervezas, vinos y whisky), "el metanol es un alcohol industrial que se extrae de la madera, y es significativamente más barato de producir. Precisamente por su bajo costo, es utilizado por inescrupulosos para adulterar bebidas alcohólicas".

El ácido fórmico, el "malvado" que destruye las células

La toxicóloga explicó que el peligro del metanol no está en su ingesta inicial, sino en su metabolización.

"El metanol llega al hígado y allí se transforma en otra sustancia que se llama ácido fórmico. Ese ácido fórmico es el malo de la historia, porque es el encargado de producir una situación que se llama acidosis metabólica. Es cuando la sangre se vuelve muy ácida", afirmó la experta.

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Esta acidez extrema de la sangre es fatal, ya que las células del cuerpo no la soportan y mueren. La especialista advirtió que "cualquier dosis de metanol es fatal para el cuerpo, no hay una dosis que se pueda considerar segura".

El sistema nervioso es el órgano más sensible a estos cambios de acidez, por lo que los síntomas iniciales son neurológicos. Dentro del sistema nervioso, el nervio óptico es uno de los más vulnerables, de acuerdo con Beleño.

"El nervio óptico se daña de manera irreparable", agregó.

La toxicóloga resaltó que las personas que logran sobrevivir a la intoxicación por metanol quedan con daños neurológicos irreversibles, siendo la ceguera la secuela más común.

Además, son frecuentes "el parkinsonismo, problemas de memoria y la descoordinación motora".

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Señales de alerta: un "guayabo" diferente y visión borrosa

La doctora Beleño alertó sobre la confusión de síntomas: "Al inicio, la intoxicación se parece a una resaca o guayabo muy fuerte", lo que lleva a las personas a minimizar la emergencia. Sin embargo, hay señales clave para diferenciarlo.

"La diferencia es que el del alcohol malo es un guayabo muy, muy fuerte. El dolor de cabeza es indescriptible. Además, les da el vómito y la visión borrosa", aseguró la galena.

La especialista insistió en que ver borroso "es un signo de intoxicación y no de simple borrachera", por lo que se debe buscar asistencia médica de inmediato.

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Tratamiento: la hemodiálisis y el "alcohol bueno"

Una vez confirmada la intoxicación, el proceso de desintoxicación es complejo. El protocolo incluye dos frentes:

Hemodiálisis, en la que según la médica, se utiliza una máquina "para sacar y limpiar la sangre del paciente", filtrando el metanol y el ácido fórmico.

Etanol (alcohol bueno): Se administra el etanol como "antídoto" para engañar al hígado. "Lo que se busca es que el hígado no metabolice el metanol, pero si el etanol", explicó la toxicóloga.

Recomendaciones para la prevención: no se confíe del sabor

La doctora Beleño enfatizó que la prevención es la única medida de seguridad, ya que el licor adulterado no puede distinguirse del genuino por sus características sensoriales.

"No hay diferencias, sabe y huele completamente igual", advirtió la experta, señalando que el olor y el sabor no son indicadores confiables de la presencia de metanol.

Por su parte, el también toxicólogo Agustín Guerrero, aseveró que "hay diferentes formas de adulterar el licor. La más común es mezclar un alcohol que tenga una concentración de alcohol con otro de menor concentración, como pasa con el whisky, que cogen uno de más precio, lo envasan en una botella de menos precio, igual pasa con el ron blanco, que le adicionan colorantes como la anilina, saborizantes, pero la más grave es esta, que utilizan el alcohol de madera o alcohol industrial (metanol)".

Guerrero explicó que "al producirse esta mezcla, se produce un daño diferente porque casi siempre va al cerebro y afecta naturalmente la retina, el nervio óptico y los núcleos basales. Por eso los pacientes que logran salvarse quedan ciegos o con problemas neurológicos".

Recomendaciones 

Comprar en sitios legales: Adquiera licor únicamente en establecimientos de confianza.

Verificar el etiquetado: Asegúrese de que la etiqueta esté intacta, que no se borre y que tenga el sello de seguridad.

Inspeccionar la bebida: El licor no debe verse turbio o con un sedimento en el fondo de la botella.